Las personas, muchas de ellas, no se conocen a sí mismas, no realizan ejercicios de introspección, no revisan su historia vital o tienen imágenes distorsionadas de ésta, perciben la vida desde el dolor o no son responsables del dolor que han causado a otr@s, se mantienen en actividad todo el tiempo buscando distractores para no enfrentarse a sí mism@s, no se analizan a nivel mental, emocional ni conductual, no trabajan psicológicamente en sus traumas y aunque los conocen no buscan la ayuda profesional pertinente, no son conscientes de sus patrones de comportamiento disfuncionales, por qué sufren, hacen sufrir a otr@s o por qué piensan de determinada forma, tampoco saben por qué carecen de autoestima o por qué se autolimitan o simplemente desconocen o no saben qué hacer con su talento o habilidad innata (tod@s tenemos una capacidad innata). Sus mentes les llevan una y otra vez al pasado (a veces de forma inconsciente) buscando las claves, ni siquiera son conscientes de que se comportan como ya se comportaron antes o sienten como ya se sintieron antes. No traspasaron historias del pasado, tapan sus heridas, no expresan aunque el cuerpo sí lo manifiesta. Las emociones se quedan ancladas, los comportamientos se repiten una y otra vez, la mente actúa al mismo nivel, la verdadera personalidad no aflora. Lo he visto muchas veces a lo largo de mi trayectoria profesional, las personas sin autoconocimiento no evolucionan a nivel personal, o incluso empeoran con el tiempo, no pueden mostrar su talento o no llevan su capacidad al máximo nivel.
El pasado siempre vuelve, de una u otra forma, para hacerte ver porqué tomaste esa decisión (errónea o no) y por mi experiencia profesional, las personas con el tiempo se estancan, o muestran una peor versión de sí mismos sin autoconocimiento y el tratamiento psicológico adecuado. Hablo por supuesto de personas con dificultades psicológicas, no de personas funcionales que ya hicieron su trabajo personal.
La mayoría de dificultades psicológicas importantes surgen en la infancia (antes de los 18 años), cuando la personalidad aún no está instaurada en el menor, cuando no comprenden el mundo que está a su alrededor. Un correcto análisis funcional te explicará la razón, la experiencia profesional con casos similares te dará información (aunque cada caso es único), las pruebas psicológicas arrojarán luz de tus patrones de personalidad, un tratamiento eficaz te ayudará a sobrepasar aquello que ya viviste y a cambiar tu vida. Una vez revivido, comprendido y superado lo que te ocurre, no tendrás que ir hacia allí nunca más. Si soprepasas, no revives, si no revives, evolucionas.
En mi centro sanitario escucho todo tipo de historias, trato diferentes dificultades psicológicas y personas con gran talento y todas tienen un factor común: dolor por algo que ocurrió y que no han logrado integrar. Las personas saben lo que les pasa pero no lo comprenden o no saben qué hacer con ello, no logran resolver por sí mism@s. Como siempre le digo a mis pacientes: “lo importante no es lo que ocurrió, sino qué vas a hacer con aquello que ocurrió”.
Lo curioso es que si encuentras en terapia las claves psicológicas, la mayoría de las personas aceptan porque quieren progresar, pero otr@s se resisten al cambio y abandonan (más bien, se abandonan a sí mism@s). Romper resistencias, barreras mentales, autolimitaciones, confiar en el profesional de la psicología que está llevando tu caso y estar abierto al cambio personal es esencial.
Una vez alguien me dijo: ”te estás resistiendo a recordar” y yo contesté: “es algo que traspasé y no quiero revivir, no pienso invertir mi tiempo en eso pues ya lo trabajé”. Una vez realizado el trabajo psicológico, volver al pasado no tiene sentido, más que para hacer uso del aprendizaje que obtuviste.
La psicología es una ciencia maravillosa dotada de herramientas terapéuticas altamente contrastadas y validadas, que resuelve, cambia y salva vidas. No es un sistema de transferencia, es un sistema fiable de ayuda al otr@,que no ocurre desde la historia vital del psicólog@, sino desde su experiencia profesional y el conocimiento que aportan los estudios experimentales y las técnicas psicológicas más actuales. El psicólog@ no hace su trabajo en su consulta/gabinete para curarse, lo realiza para curar a los demás. A colación de esto, la terapia cognitivo-conductual que utilizo en sesiones con mis pacientes/clientes es altamente efectiva, sin olvidar el componente emocional pues la inteligencia y la gestión emocional están siendo muy estudiadas y son de gran utilidad terapéutica unidas al trabajo psicológico de autoestima y al conocimiento por parte de los pacientes de los derechos asertivos.
Y tú, ¿sigues reviviendo pasado y comportándote de igual manera una y otra vez? ¿no sabes ser realmente asertivo con los demás o no conoces las habilidades sociales y un estilo de comunicación eficaz? ¿te sigue ocurriendo lo mismo que antes? ¿Tienes emociones negativas pero no sabes identificar de dónde surgen? ¿tu mente no está en presente y te cuesta resolver y avanzar? ¿te autolimitas y careces de autoestima? ¿no puedes dejar aflorar quién eres realmente y mostrar tu verdadera personalidad? ¿no sabes cúal es tu verdadero talento o capacidad? En ese caso, no dudes en autoconocerte, entender, afrontar y traspasar aquello que te hace sufrir, busca ayuda profesional, libera tu pasado y camina hacia delante, trabaja psicológicamente en ti, invierte en tu progreso psicológico. Puedes contactar en info@laurasanchezpsicologa.com