L@s psicólog@s son mis compañer@s de profesión y la mayoría ejercen buenas prácticas.
Nunca (en mis casi 20 años de profesión) he visto a l@s psicólog@s como competidores, no practico la competencia desleal, no me entrometo en su forma de trabajar (sus precios, su modo de realizar terapia, etc), para mí son mis colegas a los que derivar casos que creo que llevarán mejor que yo o a l@s que solicito ayuda si los necesito, también les ayudo si así lo necesitan.
L@s psicólog@s educativ@s, clínic@s, sanitari@s, legales, especialistas en recursos humanos, etc, tod@s son imprescindibles y especialistas en su ámbito.
Ruego que dejen de hablar de otr@s profesionales, sanitarios o no, en las redes sociales, pues el apoyo mutuo, la colaboración y las derivaciones pertinentes son también parte de nuestra profesión.
También, solicito que sean tenidos también en consideración nuestr@s compañer@s sanitari@s de otras ramas y especialidades, pues en muchas ocasiones, somos un equipo para que las personas mejoren su salud mental y general. Ni mejores ni peores, ni de mayor status o menos, tod@s somos necesari@s.
El trabajo de un profesional de la psicología implica: educación universitaria, autoconocimiento, experiencia, responsabilidad, acreditaciones, colaboración, respeto y apoyo, gestión emocional y mental, confidencialidad y un sinfín de habilidades que nos hacen esenciales para la sociedad, sin olvidar por supuesto, colaborar y/o derivar si así lo vemos conveniente.
Dediquémonos a ser el mejor equipo profesional y seguir trabajando honestamente para que la psicología se posicione aún más, como necesaria y esencial para los demás.